El pisco, una de las bebidas más emblemáticas de Chile, está dando pasos firmes hacia el reconocimiento global. El 1 de febrero de 2025, la Asociación de Productores de Pisco Chile presentará oficialmente la iniciativa para incorporar el “Paisaje Cultural Vitivinícola del Pisco Chileno” a la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Esta propuesta no solo busca enaltecer el valor histórico y cultural del pisco chileno, sino también reafirmar la identidad y la tradición que rodean su producción.
El Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, lideró recientemente una reunión clave en el Palacio Pereira, en Santiago, con la finalidad de discutir el panorama actual del pisco chileno y las implicancias de los documentos históricos que han sido interpretados como apoyo al origen peruano de esta bebida. Durante la sesión, Valenzuela dejó claro que el Ministerio de Agricultura apoyará plenamente el proyecto presentado por la Asociación de Productores de Pisco, destacando que el pisco chileno tiene una base sólida que se extiende por más de 10.000 hectáreas en las regiones de Atacama y Coquimbo. Además, resaltó el importante rol de las cooperativas y, sobre todo, la participación histórica de las mujeres en la industria.
Valenzuela también comentó que la propuesta no solo tiene el respaldo del gobierno, sino que implica la colaboración de diversos ministerios. “Queremos que el pisco chileno sea reconocido internacionalmente por su paisaje vitivinícola extraordinario, un sitio maravilloso que involucra una rica tradición y una comunidad activa en su producción”, dijo el ministro. La propuesta busca destacar no solo los elementos geográficos, sino también los oficios, las prácticas productivas y, por supuesto, la cultura que rodea al pisco.
En este contexto, Francisco Munizaga Muñoz, presidente de la Asociación de Productores de Pisco Chile, enfatizó que esta iniciativa representa mucho más que la simple inscripción de un sitio. “El pisco no es solo un producto, es un patrimonio inmaterial que refleja la cultura y las prácticas ancestrales que se han transmitido de generación en generación”, señaló. La directora del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, Nélida Pozo, agregó que el proyecto de postulación al Patrimonio Mundial no solo reconoce el trabajo agrícola, sino también la historia y la contribución de las mujeres y las cooperativas en la industria pisquera.
Chile cuenta con siete sitios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial, y la postulación del paisaje cultural del pisco busca añadir un nuevo capítulo a esta rica tradición. La incorporación a la Lista Tentativa de la UNESCO está programada para el 1 de febrero de 2025, lo que marcará el inicio de un proceso largo, pero con un objetivo claro: lograr que el pisco chileno sea reconocido a nivel mundial como un símbolo de identidad cultural.
Por otro lado, la disputa sobre el origen del pisco no ha estado exenta de tensiones. En los últimos meses, Perú ha presentado documentos ante la UNESCO que afirman el origen peruano de la bebida, lo que ha generado preocupaciones sobre el reconocimiento internacional del pisco chileno. Sin embargo, el ministro Valenzuela aseguró que este esfuerzo no representa una amenaza para Chile, ya que el pisco chileno está protegido jurídicamente mediante la Denominación de Origen, una figura legal que asegura el reconocimiento de su origen y calidad.
“Tenemos 20 tratados de libre comercio que involucran a 46 países, que reconocen el pisco chileno. La Denominación de Origen del pisco ha estado vigente desde 1931, y eso nos da la base legal para defenderlo en cualquier foro internacional”, defendió Valenzuela. Este respaldo se extiende a importantes mercados internacionales como Estados Unidos, la Unión Europea y China, donde el pisco chileno ha ganado terreno gracias a su versatilidad y calidad.
La subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Claudia Sanhueza, también destacó la importancia de la coexistencia de denominaciones de origen homónimas entre Chile y Perú. Según Sanhueza, esta solución práctica ha permitido que ambos países mantengan el reconocimiento de sus respectivos piscos sin entrar en conflictos legales innecesarios. Además, destacó que la política comercial de Chile ha sido fundamental para consolidar al pisco como un producto de exportación clave para el país.
Ignacio Fernández, director general de ProChile, añadió que la promoción del pisco en mercados internacionales ha sido exitosa, con un crecimiento notable en las exportaciones. “Entre enero y noviembre de 2024, el monto exportado alcanzó los 5 millones de dólares, lo que representa un aumento del 39% en comparación con el mismo período del año anterior”, afirmó Fernández. Este éxito refleja no solo la calidad del pisco, sino también el trabajo conjunto entre el gobierno y los productores para fortalecer la presencia de esta bebida chilena en el mercado global.
En conclusión, la lucha por el reconocimiento del pisco chileno no solo es una batalla legal, sino también cultural. La iniciativa de postular el paisaje cultural del pisco chileno a la UNESCO no solo fortalecerá su identidad a nivel mundial, sino que también pondrá en valor una tradición que ha sido parte integral de la historia de Chile. Mientras tanto, la defensa de la Denominación de Origen continuará siendo clave para proteger este patrimonio y asegurar su posicionamiento en los mercados internacionales.